No sea que yo caiga y vuelva a afligir a Dios
I
Se acerca el día de Dios, y reflexiono con sinceridad
sobre cuánta verdad he obtenido gracias a Su juicio,
no sea que caiga yo y vuelva a afligir a Dios.
El carácter justo de Dios entero apareció.
Él paga un gran precio para ganarse a la gente que siente como Él.
Si lo amo sinceramente,
debo respetar Su voluntad y aceptar Sus palabras.
II
Dios habla claro. El ciego siempre tiene noción sobre Él.
¿Cómo puedo amarlo sin conocerlo,
obedecerlo sin venerarlo con mi corazón?
El carácter justo de Dios entero apareció.
Él paga un gran precio para ganarse a la gente que siente como Él.
Si lo amo sinceramente,
debo respetar Su voluntad y aceptar Sus palabras.
III
Aun si sufro viviendo el juicio de Dios,
lo que siento son Su amor y bendición.
No puedo decepcionar Su cariño,
no me rebelaré, no importa el dolor o la adversidad.
El carácter justo de Dios entero apareció.
Él paga un gran precio para ganarse a la gente que siente como Él.
Si lo amo sinceramente,
debo respetar Su voluntad y aceptar Sus palabras.
De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”