De esta suerte, aunque caminase yo por la sombra de la muerte, no temeré ningún desastre; porque tú estás conmigo. Tu vara y tu báculo han sido mi consuelo.
Que la Virgen María ruegue por todos los que viven con dolor y pida a Dios que nos salve de nuestros pecados y dolor. Si necesita oración por usted, haga clic en el botón para unirse a nuestro grupo.